El Rayo Vallecano pone fin a la primera vuelta del campeonato el próximo sábado ante el Sevilla Atlético, un equipo que cabalga cómodamente en esta Segunda División, a diferencia del conjunto franjirrojo, que lidia con los puestos de descenso del que dista un solo punto.
Un sólido recién ascendido
El Sevilla Atlético logró el ascenso la pasada campaña tras finalizar tercero en el grupo 4 de Segunda División B. Hizo una potente temporada en la que solo perdió cuatro partidos, y ha mantenido el bloque del ascenso para tratar de consolidarse en la categoría de Plata. De este modo, en el mercado de verano tan solo realizó 10 fichajes y se desprendió de 8 futbolistas.
Entre los principales nombres de este filial sevillista destacan Borja Lasso, David Carmona o Matos, todos ellos han jugado prácticamente todos los minutos que ha disputado su equipo y son la referencia tanto en la zaga como en el centro campo de Nervión. Asimismo, en la parcela ofensiva el peligro es Ivi. El delantero suma seis goles en lo que va de campaña y el año pasado fue uno de los artífices del ascenso de su equipo logrando nueve tantos.
La sorpresa de la primera vuelta
Teniendo uno de los presupuestos más bajos de la categoría, el Sevilla Atlético ha dado la campanada y ha captado los focos de atención en Segunda División tras permanecer en los primeros puestos de la tabla durante los 20 partidos disputados. De este modo, lleva desde la novena jornada sin estar por debajo del noveno puesto de la tabla clasificatoria y llegó a estar en puestos de ascenso directo (pese a que no pueda ascender al ser filial).
El conjunto entrenado por Diego Martínez llegará a Vallecas tras golear 5-3 al Oviedo en la última jornada, y poner fin a la racha negativa de tres derrotas consecutivas. Asimismo, el filial acumula cuatro jornadas consecutivas sin ganar a domicilio, y el sábado llegará a Vallecas con la intención de dar una estocada mortal al cuadro de Rubén Baraja en este último partido de la primera vuelta.