“Más de lo mismo”
Muchísimo trabajo le queda por delante a Rubén Baraja que inicia su andadura con derrota en el Anxo Carro 1-0 ante el Lugo. Una primera parte nefasta se compensó en cierta medida con la reacción en la segunda. En líneas generales, mal partido del equipo vallecano y un punto de 21 posibles fuera de casa. Dependiendo de los resultados, el Rayo podría acabar la jornada en puestos de descenso.
Con muchos adjetivos se podría definir la primera parte del Rayo en el Anxo Carro y ninguno de ellos positivo. Desde el primer momento, el Lugo fue muy superior en todo. Sin Fran Beltrán ni Lass, ambos con sus selecciones, Baraja apostó por un doble pivote defensivo con Cristaldo y Zuculini, con Trashorras en la media punta para intentar crear. Sin embargo, los dos mediocentros estuvieron desbordados y el mediapunta gallego desaparecido. Enfrente, un Lugo con las ideas claras y aprovechándose de un equipo que ahora mismo parece roto.
El conjunto local llegaba con peligro y con bastante facilidad al área de Gazzaniga. Pedraza fue el primero en avisar con una volea desde fuera del área que el portero argentino atrapó en dos tiempos tras una jugada de memoria de los de Luis César Sampedro. Poco después, Amaya salvaba el que probablemente hubiese sido el primer gol en una llegada absolutamente sólo desde atrás de Campillo.
Se olía el gol en el Anxo Carro y acabó llegando en un córner. Después de varios rebotes en el área, el balón acabó llegando en la frontal a Seoane, que con un disparo raso cruzado superó la estirada de Gazzaniga. Como se suele decir, se hacía justicia y el Lugo se adelantaba ante un Rayo sin ideas.
A los madrileños les quedaban 20 minutos para reaccionar, pero estuvo mucho más cerca el segundo del conjunto gallego. Para colmo de males rayista, Amaya se retiraba lesionado y en su lugar entraba Quini. La mejor y la única ocasión clara de los de la franja en toda la primera parte fue de Álex Moreno con un remate de tijera dentro del área que se fue rozando el palo rival.
Lo mejor del tramo final para el Rayo, el resultado. Joselu de cabeza; Pedraza con un tiro lejano que obligó a Gazzaniga a realizar una buena parada; un remate de cabeza de Ignasi Miquel que se fue a centímetros del palo… En definitiva, un desastre total.
Mucho tenía que cambiar el equipo rayista para sacar algo positivo de su visita. Y con más corazón que ideas futbolísticas se equilibró el partido. Presionando más arriba, llegando mejor por bandas y apretando con algunos saques de esquina, el Rayo mejoró. Manucho, desaparecido como casi todos durante todo el partido, cerca estuvo de empatar con un remate de cabeza picado que se fue rozando el palo de José Juan. El Rayo dio un paso adelante y el Lugo no encontraba tanta fluidez en su juego como en el primer acto.
Sin embargo, los locales seguían creando peligro y en un córner Gazzaniga hizo la parada del encuentro. Ignasi Miquel remató sólo en el punto de penalti y el portero argentino reaccionó con un paradón para enviar a córner de nuevo. Baraja dio entrada a Miku en lugar de un desbordado Cristaldo para buscar el gol en los últimos 15 minutos. Y precisamente el venezolano tuvo la ocasión más clara pero su disparo cerca del área pequeña salió demasiado flojo y se encontró con las piernas de Jose Juan.
Ignasi Miquel vió la roja directa por una patada a Manucho para cortar un contraataque. A partir de ahí, el Rayo buscó los balones directos para sus delanteros. Se creó intranquilidad en la defensa gallega pero sin peligro claro para los intereses locales. Más de lo mismo, todo sigue igual. El Rayo reaccionó en la segunda parte, sin embargo, en líneas generales, mal partido de los de Rubén Baraja, que tiene mucho trabajo por delante.