OPINIÓN
FIRMA INVITADA: @IsaacFouto
Lo primero, gracias a mis amigos de Unión Rayo por hacerme este hueco y poder expresar en unas líneas asuntos de la actualidad ‘rayista’ que me apetecía soltar. La guerra social que se está viviendo en el Rayo esta temporada con ‘persecución’ de la coordinadora de seguridad de la policía a todo lo que huela a “Bukaneros”, denuncias a varios aficionados por parte de Antiviolencia, el caso “Zozulya” y algún que otro asunto más, están consiguiendo desviar la atención de la crisis deportiva que está viviendo el equipo. Siendo todo de suma importancia, a poco que conozcas el Rayo sabes que muchas veces es más importante lo de fuera que lo de dentro, quiero detenerme en la situación crítica en la que está inmerso el equipo en el apartado ‘césped’.
Lo primero, en el contexto en el que vamos a hablar, recalco cosas que muchos ya sabéis pero que conviene recordar. El Rayo es el club de Segunda con más presupuesto de los 22 que componen la categoría. Sus jugadores son los que más cobran en conjunto pues es la ‘masa salarial’ más elevada de todas. Y después de 29 jornadas, os recuerdo que estos jugadores, los que tienen el sueldo más jugoso, tienen a tu Rayo como uno de los 3 colistas de la categoría junto a Almería y Mirandés. Rebuscando y revolviendo en la historia, no recuerdo un club que siendo el que más presupuesto tiene se encuentre al borde del descenso.
Una cosa es hacer una mala temporada despues de caer de Primera y no subir ese mismo año (a equipos llamados ‘grandes’ le pasó) y otra es lo que se está viviendo en el Rayo con el equipo inmerso en la zona roja. Y le doy vueltas y vueltas a la cabeza, hablo con mucha gente, intercambio opiniones con otros pero no encuentro ninguna razón que consiga convencerme de lo que ocurre en este equipo. Que si los jugadores no valen, que si no son tan buenos, que si no corren… Miren, el Rayo consiguió mantener al 90% de la plantilla que el año pasado descendió por 1 punto de Primera.
Os relato cosas que algunas ya sabéis porque salieron en diferentes medios y otras posiblemente las vayáis a descubrir leyendo estas líneas. A Javi Guerra se le renovó en verano tras el interés de Málaga o Granada en ficharlo. Con 12 goles, recuerdo, fue el máximo goleador del equipo. Ahora en una categoría menor lleva 4. El Depor tentó a Trashorras para seguir en Primera, y ofreció 600.000 euros por Miku tras conocer su negativa a seguir en Vallecas. Los vecinos de Leganés soltaban 2 millones de euros por Embarba y en el pasado mercado invernal el Alavés soltaba la misma cantidad por Álex Moreno. Por Nacho también hubo ofertas de Primera. Y en cuanto a los internacionales que tiene el Rayo, el rumano Rat no es ni suplente en un equipo que está en descenso a 2B, Mojica no valía para el Rayo y sí para un equipo camino de Primera y por Lass los chinos daban casi 3 millones de euros hace apenas un mes. Cierro con Manucho, que el último día de mercado el Córdoba pagaba por el. Sí sí, por Manucho. Con todo esto preguntas que dejo en el aire ¿los jugadores del Rayo son malos? ¿no valen para mantener al equipo en Segunda? ¿esas direcciones deportivas que hicieron ofertas por casi todos están equivocadas? Dudas, dudas y más dudas.
A día de hoy los que seguimos al equipo vemos a un Rayo que se desangra jornada tras jornada, un equipo viciado y con futbolistas acomodados. Y futbolisticamente hablando ¿es posible jugar peor que este Rayo? Lo dudo. Fallos obscenos en defensa y en ataque debido a una falta de concentración que ni en partidos de alevines. Terribles sensaciones que hacen pensar en el desenlace fatal. El Rayo para salvarse tiene que ganar 7 partidos en las 13 jornadas que restan. Es decir, tiene que sumar las mismas victorias que ha conseguido en las 29 jornadas que llevamos. Sin duda, ni el más optimista de Vallecas cree en el milagro. Jugadores que cuando pudieron no quisieron y que ahora que quieren, las botas les pesan como una losa. El Rayo entró en descenso hace 2 semanas y ya lo dije por entonces, dudo que salga de esa posición.
Ya no valen las lamentaciones, los paños calientes y cantinelas varias que escuchamos semana tras semana. El equipo se mire por donde se mire es un auténtico desbarajuste: 3 entrenadores, media temporada tirada y 13 jornadas, sólo 13 por delante para caer a una catogoría a la que al Rayo le costó sangre, sudor y lágrimas salir de ella. La próxima temporada se avecinan desplazamientos a Navalcarnero o San Sebastián de los Reyes. En las modestas gradas de esos campos, volverán a estar los de siempre y dudo que sobre ese césped vuelvan a estar los que van camino de llevar al club a su segundo descenso consecutivo. Este Rayo duele y mucho. Yo sigo dándole vueltas y no consigo una explicación. Seguro que tú tampoco.